La sombra en el oasis

Las películas del desierto me enseñaron la existencia de los oasis, pero ha sido en Turquía donde he tenido la oportunidad de disfrutar de la frescura de su sombra. Junto a unos restos arqueológicos, con cerca de 45 grados y una sensación asfixiante, vimos un grupo de palmeras formando un círculo cruzado por un canal. Mientras comíamos un hombre se acerca con un macho cabrío al que le colgaban unos tésticulo del tamaño de piñas. Salgo a hacerle alguna fotos y el hombre me intenta explicar algo sobre el animal. Evidentemente no nos entendemos. De postre hay higos y dátiles. Este apunte recoge la tranquilidad del momento.`